Los vuelos en globo aerostáticos son de por sí especiales. Ahora bien, su modalidad romántica lo es aún más. Estos son los rasgos que definen ese carácter único que tanto gusta a las parejas.
Si hay un momento que merece ser privado, ese es, sin duda, el vuelo en globo romántico. La exclusividad de este servicio es clave para vivir la pasión del momento. El globo se convierte así en todo un símbolo de vuestro amor: un placer que no queréis compartir con nadie.
Al reservar un vuelo privado, solo estaréis vosotros y el piloto. Un ambiente tan íntimo y reservado es perfecto para dar rienda suelta a vuestros sentimientos. El silencio, las nubes y la sensación de tener el mundo a vuestros pies es una combinación irresistible para cualquier pareja de enamorados.
Lo que hace que un vuelo en globo aerostático sea verdaderamente romántico es la personalización. Los servicios adicionales os permitirán crear una auténtica experiencia a medida. Con tantas opciones disponibles, es imposible que haya dos vuelos iguales.
La decoración de la canasta, el brindis después del vuelo, la música... cada detalle es una oportunidad de crear un vuelo irrepetible. ¡Aprovechadlos al máximo para demostrar cuán único es vuestro amor!
Volar en globo es una actividad cargada de significado. Desde un punto de vista espiritual, simboliza elevarnos por encima de las limitaciones cotidianas para cumplir nuestros sueños. Seguro que ya te has dado cuenta de que esto encaja perfectamente con cualquier relación romántica.
Las experiencias que se salen de lo ordinario son, por definición, imposibles de olvidar. Los viajes en globo serían el perfecto ejemplo de ello. Compartir el vuelo en pareja será una vivencia común que os acompañará durante toda la vida.
Hay un antes y un después de volar en globo con tu pareja. No obstante, podéis perpetuar aún más esa experiencia con recuerdos tangibles, como vídeos, fotografías o certificados de vuelo. Imagina las emociones que os invadirán años después cuando volváis a verlos.
Hay situaciones especialmente inspiradoras para dos personas que se quieren. Volar en globo aerostático es una de ellas. El silencio, la exclusividad y la conexión con la naturaleza ponen los sentimientos a flor de piel. Es esa magia en el aire lo que nos vuelve más receptivos al amor.
Todos sabemos que hay parajes especialmente románticos. Costas, montañas, pueblecitos medievales y viñedos parecen especialmente creados para deleitar a los enamorados. Su belleza natural o arquitectónica resulta aún más embriagadora cuando se divisan desde lo alto. Con esa perspectiva privilegiada, no necesitaréis caminatas para admirar lo mejor de una localización.
Para resultar romántica, una actividad debe ser segura y tranquila. Ambas son características propias de los vuelos en globo aerostático. De hecho, su suavidad los hace aptos para todos los públicos.
Cataluña constituye una muy buena opción para todos aquellos que quieran hacer un vuelo romántico en globo. No por nada, el innegable atractivo de sus pueblos y parajes naturales es más que suficiente para encender la llama de vuestro amor. ¿Qué tal si te inspiras con algunos ejemplos?
Este macizo montañoso constituye uno de los símbolos más inconfundibles de Cataluña. El mosaico cromático formado por los bosques, trigales y viñedos de los alrededores es sencillamente espectacular.
No hay nada como ver el Pirineo y las pistas de esquí desde 2.000 metros de altura. Verdes praderas, montañas escarpadas y típicos pueblos pirenaicos conforman este exuberante paisaje alpino.
Tanto la playa como la montaña son entornos particularmente románticos. Este vuelo reúne lo mejor de ambos. Prepárate para admirar maravillas naturales como el macizo de Montgrí y la bahía de Roses en un mismo vuelo.
El pantano de Camarasa es uno de esos rincones que parecen sacados de un cuento de hadas. Lagos, montañas y pueblos llenos de encanto se unen en un paraje multicromático que invita a soñar con el amor.
Volar sobre pueblos como Sant Romà de Rubinat o Ciutadilla te lleva directamente a la Edad Media. Contemplar sus castillos y cultivos desde las nubes es lo más parecido a sentirse como un ángel.
Esta es considerada por muchos como una de las zonas más románticas de toda Cataluña. Verdaderamente, el amor realza de manera singular la belleza de maravillas como la Seu Vella o los frutales en flor de Aitona.
Lo cierto es que cualquier época del año es buena para organizar un viaje en globo romántico:
Dos personas que se aman merecen gozar de experiencias que estén a la altura de su relación. En Globus Kon-Tiki lo tenemos todo listo para hacer realidad el vuelo en globo romántico que siempre habéis soñado. Resérvalo hoy mismo y haréis que vuestro amor se eleve por encima de todo.